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Tres fabricantes subieron al podio en dos de las tres carreras del Round Yamaha Finance de Australia. Ese no es un fenómeno extraño en las carreras del Campeonato del Mundo MOTUL FIM Superbike: Ha ocurrido en 304 ocasiones a lo largo de la historia de la competición, incluida la primera carrera disputada en Donington Park, en 1988. Bimota, Ducati y Honda subieron al podio en esa ocasión, mientras que el podio más reciente con tres marcas repartiéndose la gloria tuvo a Ducati, Yamaha y Kawasaki como protagonistas.

Es un hito que ha ocurrido en todas las temporadas de WorldSBK desde que comenzó el Campeonato en 1988, excepto en 2003 y 2004, dos temporadas que estuvieron marcadas por el gran dominio de Ducati.

A pesar de la hegemonía de Jonathan Rea (Kawasaki Racing Team WorldSBK) en las campañas recientes, tener a pilotos de tres fabricantes en el podio ha sucedido 46 veces desde 2015, el año en que el norirlandés ganó su primer título, lo que hace pensar que el hecho de que un piloto domine la competición no significa necesariamente que la montura que conduce también lo haga. Ha habido 146 carreras desde el comienzo de la temporada 2015, incluidas las de Phillip Island 2020, con casi un tercio de los podios compartidos por tres fabricantes.

En los años del dominio de Rea, tres fabricantes han compartido los cajones del podio en 46 ocasiones. En 2019 hubo 14 podios con representación de tres fabricantes, aunque hay que matizar que ese fue el curso en que se introdujo la Carrera Tissot Superpole, que agrega otras 13 carreras al calendario.

Quizás la temporada más interesante a tener en cuenta con respecto al tema que nos ocupa es la de 2000, en la que Colin Edwards (Honda) ganó el título de Pilotos con un margen relativamente saludable de 65 puntos sobre Noriyuki Haga (Yamaha). Pero profundizando más, fue una campaña muy reñida entre los distintos fabricantes. Los seis primeros pilotos del Campeonato conducían monturas diferentes de Honda, Yamaha, Aprilia, Suzuki, Kawasaki y Ducati, y la mayoría de carreras tuvo a tres marcas distintas repartiéndose los cajones del podio. De hecho, solo siete de las 26 carreras no tuvieron a tres fabricantes en el podio.

La competitividad de los fabricantes se demuestra con un dato: Solo ha habido 60 podios copados por una sola marca, y casi la mitad de ellos (27) ocurrieron durante el gran dominio de Ducati, entre 2003 y 2004. La última vez que sucedió fue con la exhibición de Kawasaki en la Carrera Tissot Superpole de Donington Park, en 2019.

Que haya una amplia diversidad de fabricantes competitivos no es un fenómeno nuevo, y todo apunta a que continuará siendo así. En Phillip Island hubo dos fabricantes en el primer cajón del podio (Yamaha y Kawasaki), y un tercero en todos los podios del fin de semana (Ducati), mientras que BMW anotó la pole position para la Carrera 1 y el regreso de Honda como equipo de fábrica terminó con un doble top 6 en las carreras que abrieron la competición. Los cinco fabricantes presentes en la parrilla iniciaron la campaña 2020 con razones para sonreír y argumentos para seguir haciéndolo a medida que continúe la competición.

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